DIME QUE ME QUIERES

Estoy a punto de salir, es sábado por la tarde y espero un poco, un poquito más, para ver Aplauso y salir energizado del verdadero Rock and roll español. Si los Rolling tuvieran un hijo musical aquí, TEQUILA lo sería sin duda. Mi Ford se deslizaba con mi casette sonando, hacía el pub donde esperaría algo especial esa noche sin saber donde lo iba encontrar pero tampoco me preocupaba demasiado, ese era, ese es, el camino. Ariel Rot y Alejo Stivel estaban allí al final de la todo para encenderlo de una locura colectiva en los 80, la década más productiva social y cultural de era reciente, donde todos contribuimos a que todo esto cambiase, a que todos ellos se dieran cuenta que tenían que cambiar. El calor de la disco sacude mi cara. Aquella noche lo dije pero no se si me contestaste. ¿Estás ahí chica leyendo?, ahora puedo decírtelo de nuevo, DIME QUE ME QUIERES. Guardadme un plaza de aparcamiento, llegaré tarde a casa.